La gente puso la fiesta en el Monumental. Toda la capacidad para Boca estuvo colmada para seguir al equipo como a lo largo de todo el campeonato. El equipo puso todo, pero no pudo con un River que aprovechó el momento justo.
El encuentro comenzó complicado para los de Borghi. Román no encontró el partido y se mostró dolorido antes del primer cuarto de hora. Sin embargo, el Xeneize intentó controlar al rival y generar situaciones. En los pies de Jesús Méndez se pudo ver un pase espectacular a Pablo Mouche que no llegó a definir ante Carrizo cerca de los 30 minutos. Esa fue la más clara de Boca en la primera etapa. Por su parte, Palermo estuvo activo, moviéndose y pivoteando en la mitad del terreno. Igualmente, el local contó con las mejores situaciones en la primera mitad.
Lamentablemente, Román no pudo recuperarse y en el entretiempo tuvo que salir y dejarle su lugar a Pochi Chávez.
En el complemento todo fue difícil para el visitante. Tanto que apenas a los 8 minutos un ex Boca, Jonatan Maidana, metió un cabezazo en el segundo palo que García no pudo controlar. A partir de ese momento, el Xeneize intentó presionar en todos los sectores pero todo parecía muy complicado para un Boca que no encontró los caminos, a pesar de buscar constantemente.
Ahora resta trabajar a lo largo de la semana para mejorar y pensar en todo lo que se viene de aquí en más para el Xeneize.
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